Primavera con sol, flores, verde, es una hermosa estación, pero para algunos… un problema.
Comenzamos con los síntomas estacionales.
Los síntomas como picazón, estornudos y rinorrea, causados por enfermedades alérgicas suelen reducir la calidad de vida.
Es muy frecuente recibir consultas sobre, alergias estacionales, sobre todo en esta época del año.
Lo primero que surge es… a que solución más rápida puedo acceder. Y te dicen, tu familia, amigos o conocidos…tomate un antihistamínico y listo!
NO te automediques, consulta con tu medico y/o farmacéutico. Todos tienen efectos colaterales que pueden afectar tu desempeño diario y ocasionar algunos inconvenientes.
Pero, que son? Es correcto tomarlo?
Los antihistamínicos H1 (AH1) son un grupo de medicamentos muy utilizado para reducir o eliminar los síntomas de las reacciones alérgicas, incluyendo afecciones respiratorias como la congestión nasal. Están disponibles en especialidades medicinales como único principio activo, asociados a corticoides o en combinación con uno o más principios activos en productos “antigripales”, éstos últimos no están recomendados en muchos casos.
Se ha informado que millones de personas experimentan discapacidades físicas y reducciones en la calidad de vida, así como cargas económicas, derivadas de enfermedades alérgicas y sus comorbilidades asociadas.
AH1 de primera generación (clásicos o sedantes): Se emplean desde hace más de 70 años, pero su uso clínico se ve reducido por sus efectos adversos. Atraviesan con facilidad la barrera hematoencefálica y producen efectos no deseados sobre el sistema nervioso central. Además poseen un bajo índice terapéutico y alto riesgo de toxicidad por sobredosificación. A este grupo pertenecen la difenhidramina, la clorfeniramina y la hidroxicina. Pueden afectar el tiempo de reacción de los pacientes, por lo que no se aconseja manejar vehículos, maquinarias o realizar actividades de trabajo riesgosas y que requieran estar en estado de alerta. Tampoco es aconsejable tomar alcohol, ya que la interacción incrementa los efectos depresores del sistema nervioso central, generando sueño, mareos, confusión y dificultad en realizar tareas.
La medicina avanzo y surgen los AH1 de segunda generación (no sedantes), la baja permeabilidad cerebral y una duración de acción más prolongada con menos efectos adversos. Su prolongado efecto facilita su administración en una o dos dosis diarias. Estas características favorecen su uso en el tratamiento de la rinitis alérgica, la conjuntivitis alérgica y la urticaria crónica, donde han demostrado su utilidad en numerosos ensayos clínicos. Los AH1 de este grupo mejor estudiados y más utilizados son cetirizina, levocetirizina y loratadina. Como efectos adversos más comunes pueden presentarse: Dolor de cabeza, cansancio, boca seca. La ingesta de alcohol durante el tratamiento con cetirizina puede aumentar los efectos secundarios como mareos, somnolencia, confusión y dificultad para concentrarse. Algunas personas también pueden experimentar dificultad en el pensamiento, el juicio y la coordinación motora.
Los mas nuevos en el mercado farmacéutico son AH1 de tercera generación: Se trata de modificaciones de fármacos ya existentes. No hay evidencia en la práctica de que estos nuevos antihistamínicos (desloratadina, fexofenadina) sean superiores a los de segunda generación (es más, algunos autores los incluyen en la segunda generación).
Por todo esto, antes de tomar un medicamento. Consúltame, siempre voy a dar respuesta.