En Rosario ganó la abstención

Monteverde, Aleart y Labayru festejaron el reparto en tercios de los votos emitidos, pero la mayoría fue el 52% que no concurrió

La pregunta se impone. ¿Qué festejan los políticos? Los candidatos y un puñado de militantes cantan, gritan, saltan y celebran. Lo paradójico es que todos ganaron. Cada sector se aferra al mismo resultado electoral para explicar su alegría. Juan Monteverde, Juan Pedro Aleart y Carolina Labayru son los referentes de un escrutinio en los que repartieron tercios. Porque la mayoría fue para la abstención. ¿Cómo? Sí. El 52 por ciento del padrón no fue a votar.

Entonces, mientras los políticos y sus militantes festejaban, gran parte de la sociedad fue indiferente.

El mensaje mayoritario fue contundente. La gente no ve en la política la solución a sus problemas. Hartazgo y saturación asoman como síntomas peligrosos para la salud de la democracia.

Pero lejos de incorporar lo que la apatía popular indica, los políticos ya comenzaron  a proyectar las candidaturas a intendente para el 2027. Como si el país y el mundo fueran previsibles. Cuando la ambición supera al sentido común, la situación tiene pocas posibilidades de modificarse.

Será muy difícil transformar esta realidad ignorando lo que expresa la mayoría de los ciudadanos, porque más allá de los votos que obtuvo cada fuerza, lo más importante fueron los votos que no se emitieron. Dato concreto. Frío como el día. En sintonía con la frialdad que mostró el público hacia las elecciones.

About The Author

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *