La canción, que se incluye en su álbum “Little Queen” (1977), es un grito de venganza de Heart contra la productora discográfica Mushroom Records que lanzó un controversial rumor sobre la banda.
Un hombre, quien nunca pudo ser identificado por la banda, pero que siempre se sospechó que trabajaba en la parte de relaciones públicas de la compañía discográfica en la que estaban, Mushroom Records, intento poner a Heart en el podio de los grupos de rock a través de un método totalmente desacertado.
A este personaje le pareció que podía servir de “gancho” para las audiencias inventar que Ann y su hermana Nancy estaban teniendo “una relación incestuosa”, por lo que empezó a hacer circular esa versión para ver si los medios se hacían eco, lo que efectivamente terminó sucediendo generando el enojo de toda la banda.
El hombre, quien nunca pudo ser identificado por la banda, que siempre sospechó que trabajaba en la parte de relaciones públicas de la compañía en la que estaban, Mushroom Records, quiso poner a Heart en el podio de los grupos de rock a través de un método totalmente desacertado. A esta figura le pareció que podía servir de “gancho” para las audiencias inventar que Ann y su hermana Nancy estaban teniendo “una relación incestuosa”, por lo que primero empezó a hacer circular esa versión, para ver si los medios se hacían eco, lo que efectivamente terminó sucediendo.
Lo que terminó detonando todo fue un episodio que sucedió después de un concierto del grupo. El hombre se le acercó Ann y le preguntó: “¿Cómo está tu pareja?”. Ann pensó que se estaba refiriendo a su novio, Michael Fisher, manager de Heart, sin embargo, el hombre le hizo una aclaración: “No, no, estoy hablando de tu hermana”.
La bronca de Ann fue tal que en ese mismo momento se dirigió a su habitación de hotel para escribir el primer boceto de lo que sería “Barracuda”, el single con el que luego se decidió promocionar Little Queen.
Por lo tanto, no es casual que la canción repita cómo “no hay cosas malas o buenas” en el mundo de los negocios cuando se trata de “vender una canción”.
«Barracuda» se convirtió en un símbolo de resistencia contra el sexismo y la falta de respeto hacia las mujeres en el mundo del rock.
