La planta de cannabis se utiliza hace siglos con fines medicinales, pero se la conoce más por sus efectos en el uso recreativo. Justamente, los resabios de un paradigma prohibicionista son los que nos trajeron hasta acá, impidiendo que muchos pacientes se beneficien cuando sufren dolores crónicos, enfermedades complejas mentales y físicas, siempre de acuerdo a los estudios mundiales que avalan su uso y efectos en determinadas patologías, que son muchas más de las que hasta ahora pueden recurrir legalmente al aceite.
¿Qué es el aceite de cannabis?
El aceite de Cannabis es una extracción que genera una matriz resinosa de cannabinoides obtenidos a partir de la planta. Su extracción se realiza mediante disolventes, cuyo resultado es una pasta viscosa que se endurece. A partir de aquí, tenemos lo que se considera “la materia prima” para fabricar los preparados.
Hoy, en nuestro mercado del medicamento, solo tenemos una marca que nos aporta una sola dosis en dos presentaciones diferentes. Claramente nos está faltando la posibilidad de que a partir de esa materia prima, la resina, desde las farmacias se puedan preparar las diferentes versiones de este medicamento. En la legislatura provincial hay un proyecto ingresado que veremos cómo avanza y qué permitirá en un futuro.
La farmacia y los profesionales están preparados para que se avance en este proyecto. Es algo que viene planteando hace tiempo: la posibilidad de preparar recetas magistrales en base a cannabis.
¿Qué es un magistral?
Es una forma de preparar medicamentos personalizados asegurando la calidad y seguridad a partir de tener registrado con una titulación exacta la procedencia de la materia prima. Su elaboración es importante para tener la variabilidad de dosis que permita empezar con una dosis pequeña, ir modificando, aumentando, hacer una dosis de carga o de rescate, según el criterio médico aplicado a cada paciente.
Por todo esto, es necesario regular la comercialización del aceite de cannabis, ya que al no contar con una legislación que proteja al paciente, y a la farmacia que lo pueda preparar, lleva a que ese paciente recurra al mercado ilegal, informal y peligroso. Sabiendo, además, que la ley nacional 27350 en su art 7 remarca que se habilita a las farmacias a producir magistrales de este tipo, pero no hay un lugar habilitado para comprar la materia prima.
Veremos cómo evolucionan estos proyectos en la cámara provincial, para llevar seguridad a los pacientes que necesitan del aceite de cannabis